El Lago de Maracaibo despierta bajo un cielo dorado que se funde con las aguas tranquilas, en una escena que irradia calma, calidez y armonía. Esta fotografía captura la magia de la hora dorada, donde cada rayo de sol suaviza el paisaje y resalta su belleza natural.
Una imagen perfecta para transmitir serenidad, conexión con la naturaleza y el encanto del trópico venezolano.
Fotografía artística y de autor para decorar con intención.
Reseñas
Aún no hay reseñas